Son muchas las dudas y miedos que pueden asaltarnos a la hora de tomar la decisión de emprender un viaje en solitario, especialmente si se trata de la primera vez que nos lanzamos a la aventura. Por un lado, el dinero y el tiempo libre son dos condiciones sine qua non para cumplir nuestras ansias aventureras. Por otro lado, las circunstancias de nuestros amigos, familiares o pareja no siempre les permitirán que disfrutemos de su compañía mientras descubrimos nuevos rincones. De lo que no cabe ninguna duda es de que viajar sin compañía supone una experiencia única y enriquecedora, pero para poder disfrutarla, primero hay que atreverse. A continuación, las 7 razones por las que deberías de viajar solo:
- Conocerse mejor a uno mismo, tanto en aspectos negativos como positivos. Podremos meditar sobre nuestros comportamientos, sentimientos y situaciones personales.
- Ser el único dueño de tus decisiones. El placer de elegir libremente qué hacer o ver cada segundo, sin que nadie te juzgue, ni tengas que discutir por ello.
- Capacidad de improvisación. La flexibilidad del itinerario es mucho mayor, por lo que tenemos el poder de administrar el tiempo disponible a nuestro gusto.
- Mejorar tus habilidades sociales y conocimiento de idiomas. La predisposición a socializar con otras personas desconocidas es mayor y más necesaria en este contexto. Incluso podremos hacer amigos para toda la vida, ya que es relativamente sencillo encontrar gente con valores y percepciones del mundo similares a las nuestras entre otros viajeros.
- Valores humanos. Entrar en contacto y conocer otras culturas nos ayuda a empatizar y obtener una visión del mundo personal, muy diferente de la que nos llegaría a través de los medios de comunicación. Así creamos nuestro propio sistema de creencias.
- Superación e independencia. Es importante saber sobreponerse a las posibles adversidades que nos encontremos en el camino. Para ello es necesario aprender a tomar buenas decisiones, a la par que ser consecuentes y responsables con las mismas. Muchas veces, vivimos atrapados en la rutina y se hace necesario salir de nuestro entorno y zona de confort para valorar lo que tenemos.
- Mejorar la percepción del entorno. Eres tu propio cuidador, por lo que siempre debemos mantener un ojo abierto y prestar atención a todo lo que sucede a nuestro alrededor. Aprender a diferenciar entre adrenalina y situación de riesgo.
Desde turismo-activo os invitamos a que no os quedéis con las ganas turistear por el hecho de no tener un acompañante. Viajar solo es una experiencia de gran valor y utilidad para todo el que se aventura y que, conviene vivir al menos una vez en la vida. Es probable que tengamos que afrontar situaciones o momentos complicados durante nuestro trayecto, pero a pesar de todo, a nivel de desarrollo personal, compensa y mucho. Si aún no estáis convencidos y sois un poco desconfiados, podéis consultar qué países son los más seguros para viajar solo.