Cada primer domingo del año, la localidad de Silió (Molledo, Cantabria) celebra una curiosa fiesta declarada de Interés Turístico Nacional.
Esta fiesta, que simboliza el triunfo del bien sobre el mal, tiene su origen en las costumbres romanas, aunque también se la relaciona con los dibujos de las cuevas de Altamira. Durante su celebración, las gentes se visten con máscaras y pieles de todo tipo de colores para representar diversos personajes con diferentes simbologías.
- El danzarín blanco, se encarga de abrir la comitiva saltando y danzando
- El danzarín negro, antagonista del danzarín blanco que dirige el acto de la raya
- El zarramago, el guerrero del bien, ataviado con cencerros para espantar al mal
- Los guapos, representa la riqueza y el estatus social
- La madama, el mancebo y el marquesito, un hombre travestido, un mozo con traje negro y un niño bien vestido que representan lo bueno por llegar, un nuevo comienzo
- La preñá y el marido, que representan el nacimiento de un nuevo año
- El oso y el amo, unidos por una cadena y donde el oso (representante del mal) es acosado y perseguido
- Trapalones, representantes de la naturaleza
- El viejo y la vieja, reflejo del paso del tiempo
- El caballero, portador de la abundancia y la divinidad
- Las gorilonas y el húngaro, la dominación de la naturaleza
- La pepa, símbolo de la matanza del año viejo por el año nuevo
- El zorrocloco, simboliza la inteligencia y astucia del mal
- Los traperos, ataviados con trapos de colores
La jornada comienza con el sonar del cuerno y los cencerros seguidos de la bajada de los Zarramacos, personajes que se dedican a espantar a los malos espíritus del año viejo, culminando con sus bailes. Finalmente, el oso es conducido hasta la plaza donde se le dará caza bailando a su alrededor celebrando el triunfo del bien.
Sin duda una fiesta digna de vivir en directo. Para más información visita la página de la Asociación Cultural Amigos de la Vijanera.