Cada 20 de enero, en las calles de San Sebastián se pueden disfrutar de las tamborradas que llenan la ciudad de color y sonido.
Para celebrar el día de San Sebastián muchos turistas visitan la ciudad de San Sebastián para disfrutar de las tamborradas y fiestas en honor a su patrón. La fiesta comienza a las 00:00 h en la plaza de la Constitución con la izada de la bandera de la ciudad. Entonces, la Sociedad Gaztelubide y los representantes de otras tamborradas empiezan a interpretar las melodías de Sarriegui, que sonarán en la ciudad durante todo el día.
Los bares y establecimientos permanecen abiertos para una noche de autentica guapasa (pasar la noche en vela en euskera) y hasta las 12 de la noche del día 20 no se termina la jornada festiva.
La historia comenzó en 1836 como una de las comparsas del carnaval donostiarra; al poco tiempo se empezó a tomar como tradición festejar al patrón recorriendo las calles de San Sebastián. En un principio, los participantes iban disfrazados, pero más tarde se uniformaron como los militares que había en la ciudad. Los primeros uniformes utilizados reproducían los de los batallones gipuzkoanos que intervinieron en la Guerra de la Independencia y tenían un estilo francés de vestimenta militar. A medida que se fue ampliando el número de participantes en la tamborrada, se dio entrada a otras compañías con otros uniformes.
Este día es prácticamente imposible no ver ninguna tamborrada por las calles de San Sebastián, y es que más de 147 compañías (formadas por entre 20-50 tambores y 50-100 barriles, acompañados por una banda de música, abanderados y cantineras) dan vida a la ciudad con sus canciones y bailes.
A las 24:00 horas del día 20 la tamborrada Unión Artesana es la encargada de arriar la bandera y dar por finalizada la fiesta hasta el año siguiente, dejando algunas lágrimas de emoción entre el público donostiarra