Partiremos de la Plaza Mayor donde se encuentra la Iglesia de San Juan, con uno de los rosetones más elegantes del románico. En esta zona también encontraréis el Ayuntamiento.

Bajando la calle del Corral Pintado, llegaremos a la Plaza de Santa María la Nueva, donde veréis la iglesia con el mismo nombre. Justo al lado también podréis visitar el Museo de Semana Santa.

Torciendo a la izquierda se encuentra una de las plazas más emblemáticas de la ciudad, la Plaza de Viriato. En esta zona se encuentra el palacio de los Condes de Alba de Aliste, actual parador de turismo.

Iremos ahora hacia la Iglesia de San Cipriano, y retomando la Rúa de los Francos, hacia la Iglesia de la Magdalena, uno de los templos más bonitos de la ciudad.

Un poco más adelante tenemos la Iglesia de San Ildefonso. Os recomendamos rodearla para ver sus arcos.

Dirigiéndonos hacia el río iremos a parar al mirador de Troncoso, con una de las mejores vistas de la ciudad.

Iremos ahora hacia la Casa del Cid, de la cual dicen que vivió dicho personaje. De ahí pasaremos hacia la Catedral para acabar la visita unos metros más adelante en el Castillo de Zamora para disfrutar de sus vistas.