Queremos que conozcas todos los rincones de esta fantástica ciudad, por ello te invitamos a seguir esta ruta.

Comenzaremos la visita en el Monasterio de Huelgas, algo alejado del centro histórico pero un lugar imprescindible.

Cruzaremos el río hasta llega al Arco de Santa María, una de las 12 puertas que daban entrada a la ciudad medieval. Si entráis por ella podéis subir sus escaleras para ver las salas de exposición. 

Saliendo por el otro lado llegaremos a la famosa Catedral de Burgos, monumento por excelencia de la ciudad. Dedica todo el tiempo que necesites a observar cada detalle de su fachada y después pasa a su interior a visitarla con calma.

Cogiendo el Paseo del Espolón (por el cual os recomendamos pasear tranquilamente si tenéis tiempo) llegaremos a la Plaza Mayor, centro neurálgico de la ciudad y en la que podréis encontrar la Casa Consistorial y numerosas tiendas y bares donde parar a tomar un aperitivo.

Siguiendo con el recorrido, si decidís retomar el paseo os encontraréis con la estatua del Cid Campeador, de ahí llegaremos a la Plaza de la Libertad donde se encuentra la Casa del Cordón, la cual sirvió de alojamiento para reyes e infantes. 

De ahí os invitamos a volver a cruzar el río para visitar el museo de la Evolución, un imprescindible en esta ciudad.

Para terminar la visita, ya de cara al atardecer, os recomendamos visitar el castillo de Burgos y su mirador, sin duda una de las vistas más bonitas de este viaje.

Esperemos que disfrutéis de la ciudad, ¡buen viaje!